martes, 12 de junio de 2012

Tras tus pasos

Composición musical para piano, violín y clarinete. Música y edición del audio: Sergio Galán Parro

7 comentarios:

  1. ¡Me gusta, ¡ me recuerda a Piazzola y perfectamente podría entrar el acordeón o bandoneón. Como músico me atrae la pieza en muchos aspectos, pero si quiero saber como es la melodía tengo que escucharla varias veces para poder atraparla.
    ¿Es bueno esto? no lo sé. Sólo es un trabajo entre otros que tú habrás hecho y cuidado o buscado en ellos ciertas ideas.
    Hoy queremos melodía, mañana ritmo y pasado colores. Por eso mi opinión no es objetiva ya que tendría que escuchar otros trabajos tuyos y saber si cuidas y trabajas de forma diferente y sobre el abanico de posibilidades que te puede dar la composición. Eso sí ¡me gusta! Pero…..
    Es bonito el momento donde se queda el violín y el clarinete solos, pero la entrada del piano no me parece que deje claro que se ha producido algo diferente en la pieza, para ello el piano debería de entrar de forma más contundente y distinta a lo que está realizando los otros dos instrumentos.
    Por eso la pieza es suave durante todo el tiempo, pierde fuerza por que en ningún momento se la renuevas.
    Aunque le pusieras un bajo y una batería no se produciría ningún cambio, sólo son elementos añadidos es decir, nada.

    Como músico, me gusta la pieza, como oyente se me olvida.

    ¿Tú que piesas?

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  2. Desde luego, esto es un antes y un después. Te felicito. A estas alturas, nadie puede negarte la facultad que tienes de profundizar hasta los rincones más íntimos de la armonía. Echo de menos un punto más irreverente, aún así, me ha sorprendido y me he dejado llevar. Me has hecho recordar a las sublimes piezas propias de las películas de Aristarain. Una abrazo.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Desde mi aún pobre conocimiento puedo decir que me atrae mucho esta obra nueva que has compuesto. Espero que, con el crecimiento musical que persigo, pueda apreciarla algún día incluso más.

    Tras tus pasos quiero ir yo.

    ¡Enhorabuena Sergio!

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  5. A propósito de los comentarios de Antonio Rodríguez. “Si quiero saber cómo es la melodía tengo que escucharla muchas veces para poder atraparla”. Si verdaderamente escuchas la melodía es que la tienes atrapada; otra cosa es que la tengas que escuchar muchas veces para poder comprenderla. Aunque, lo que tú llamas melodía debe llamarse, con propiedad, Discanto, el canto que destaca por encima de un acompañamiento; estamos ocupándonos entonces de la textura, en este caso de la textura homofónica. Pero el concepto de homofonía que tienes, por lo que se desprende de tu comentario, es muy simple: una melodía despegada de un acompañamiento, que por si sólo carece de valor artístico; un ejemplo de ello es la música de los maestros timplistas, donde la melodía ejecutada por el timple ni siquiera constituye una elemental composición a dos voces con el bajo del acompañamiento. El concepto de homofonía que hay de fondo en esta pieza musical, es un concepto mucho más amplio y más profundo que el vulgar concepto de melodía más acompañamiento que anida en la cabeza de una inmensa cantidad de músicos. Aquí yacen los siguientes conceptos:
    Referente a la Textura: (1) Melodía Compuesta en horizontal, (2) Melodía Compuesta en vertical, (3) Conjunto del bajo con el resto de voces del acompañamiento, (4) Conjunto del violín y clarinete con el bajo del acompañamiento.
    Referente a la Organización Tonal: (1) Relación de Contrapunto de las partes del acompañamiento entre sí, (2) Relación de Contrapunto de las partes solistas con el bajo del acompañamiento, (3) No contradicción de las partes del acompañamiento, aparte del bajo, con las partes solistas, (3) Armonía y Progresión de Grados que conforman el conjunto del total de las partes (Discanto y Acompañamiento) como un todo indisoluble.
    Referente a la Forma: (1) Organización de las Relaciones de Duración de los sonidos individuales y de los sonidos agrupados (Impulsos), (2) Unidad en la división del Acompañamiento en relación al Discanto, (3) Remates de las secciones de la pieza, (4) Transiciones entre las secciones.
    Referente a la Orquestación. (1) Unidad en el Timbre para la formación de melodías compuestas (2) Separación en el timbre para la disolución de la melodía compuesta, (3) Separación en el Timbre para la fragmentación de una melodía (orquestación mixta).

    “Como músico, me gusta la pieza, como oyente, se me olvida”. Esta es una dualidad imposible, la cuadratura del círculo. Si alguien se hace músico ya deja de existir como oyente, como profano en la materia. Por lo tanto, lo único que queda es si, en cuanto músico, uno tiene adquirida la capacidad de captar aquello que es musicalmente profundo y distinguirlo de lo que es musicalmente superficial.

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  6. Para Vicente. Está genial el comentario que has puesto a raíz de mi pequeña crítica de la composición de Sergio.
    Los múltiples conceptos que aquí expones es de agradecer que me los vuelvas a recordar y hacerme pensar en ello.
    También es verdad que si soy músico tengo que pensar y opinar cómo músico.

    Saludos.

    Antonio Rodríguez.

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  7. Hola Antonio.Creo que cuando hay elaboración y profundidad en una compposición musical, y ese debe ser siempre el propósito, hay que escucharla con atención muchas veces, Esta melodía no se puede retener facilmente porque es compleja tanto en la forma como en su contenido tonal; además el hecho de estar concebido como conjunto y repartida en los distintos timbres hace que se necesite escuchar muchas veces. Creo que debemos ordenar y profundizar los conceptos relativos a la forma, la organización tonal, la textura y la orquestación para que cada vez tengamos un mayor control del proceso compositivo. Saludos, Sergio Galán.

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